Si eres de las personas que toma analgésicos de venta libre con frecuencia, presta atención a este hallazgo: un estudio reciente ha encontrado que el uso excesivo y prolongado de los analgésicos del grupo AINE, como el ibuprofeno o el diclofenac, puede aumentar las probabilidades de desarrollar problemas cardíacos.

Algunas personas los toman por cualquier molestia sin pensar que pueden hacerles daño. Otras, en cambio, necesitan de los llamados antiinflamatorios no esteroides (AINEs) para calmar dolores crónicos, como los que provoca la artritis reumatoide.

El problema es que estos medicamentos pueden tener efectos no deseados. Por ejemplo, un grupo de investigadores de la Universidad de Oxford, en Inglaterra, ha encontrado que cuando se toma ibuprofeno o diclofenac –dos de los analgésicos de tipo AINE (antiinflamatorios no esteroides) más utilizados-

en grandes cantidades y durante un periodo prolongado de tiempo, pueden aumentar levemente las posibilidades de desarrollar problemas del corazón. El riesgo sería mucho mayor cuando lo toman a diario personas que fuman o que son obesas.